Rustico, buono stato, 580 m², Sóller

En el corazón del patrimonio mundial de Tramuntana, esta soleada propiedad de 580 m2 se ubica en una parcela de 20.300 m2 en una ubicación privilegiada a las afueras de Sóller, disfrutando de absoluta privacidad. La casa principal, con una superficie habitable de unos 310 m2 más terrazas, se distribuye en tres niveles y cuenta con tres dormitorios, todos con baño propio.

La planta baja alberga un amplio espacio de salón-comedor con cocina integrada, así como un salón con área de trabajo y chimenea. Todas las habitaciones están equipadas con calefacción radiante, aire acondicionado y acceso a las terrazas circundantes. Además, hay un aseo para invitados.

La primera planta ofrece dos amplios dormitorios con grandes ventanas que permiten la entrada de abundante luz natural, cada uno con su propio baño. El dormitorio principal con su baño en suite se encuentra en la planta superior y ofrece una impresionante vista a las montañas. Los dos pisos superiores tienen suelos de madera y calefacción central de gasóleo.

También hay un sótano. Este alberga un lavadero, una bodega y un espacio de almacenamiento adicional.

El exuberante jardín está plantado con una variedad de árboles frutales, incluyendo naranjos, limoneros, mandarinos, higueras, perales, manzanos, aguacates, kumquats y nísperos. Una amplia piscina de agua salada invita al descanso.

La propiedad también cuenta con instalaciones ecuestres, como una pista para montar y establos. Es interesante destacar la producción propia de vino y aceite de oliva. Ya existe un apartamento para invitados de unos 40 m2. Hay amplio espacio para aparcar. Un pozo, un manantial natural y tres grandes cisternas suministran agua a los huertos, viñedos y flora. El agua de la red principal abastece la casa y la cabaña.

La propiedad se encuentra en un estado impecable, fue completamente renovada en 2020 con materiales de alta calidad, combinando diseño moderno con un ambiente mediterráneo.

El centro de la ciudad de Sóller está a solo 20 minutos a pie, mientras que el puerto, con su marina, playa y restaurantes, está a solo 10 minutos en coche.
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