Esta casa de pueblo es una autentica joya de estilo tradicional. Nada mas abrir la puerta, le sorprenderan los techos altos que dan a la estancia una sensacion de amplitud y espacio. El interior cuenta con baldosas de ceramica antiguas que desprenden un encanto rustico y dan a la casa un ambiente calido. La casa tiene una superficie habitable de aproximadamente 140 m2 que se divide en un amplio salon/comedor, una cocina, un lavadero, un dormitorio doble y un cuarto de bano con ducha en la planta baja. En la planta superior hay otros dos dormitorios y otro cuarto de bano con ducha. Pero lo mas destacado de la casa es, sin duda, la amplia y soleada terraza de la azotea. Aqui podra relajarse, leer un libro o tomar una copa mientras disfruta del calido sol. En general, esta casa de pueblo es un ejemplo perfecto de encanto tradicional y confort. Con sus muchos detalles encantadores, es un lugar perfecto para disfrutar de la belleza y la tranquilidad de la vida en un pueblo costero.